Valoraciones iniciales de la catástrofe del 13 de enero.
1. La vulnerabilidad de la población salvadoreña ha quedado al desnudo en forma trágica y dantesca con el terremoto experimentado el 13 de enero. Más de 600 muertos en 12 de los 14 departamentos del país, más de 25,000 evacuados en decenas de poblaciones no pueden explicarse únicamente por el fenómeno natural.
2. La absoluta carencia de planes de emergencia y desorganización sistemática de parte del GOES ha quedado en evidencia. El Comité de Emergencia nacional (COEN) insiste, como lo hizo con el MICHT, en confundir alevosamente el fenómeno natural con la tragedia que sufren los salvadoreños. No puede explicar porqué a 6 horas de ocurrida la tragedia, nadie sabía que San Agustín en Usulután y Comasagua en la Libertad habían sido arrasadas por el desastre natural, ni menos aún, nadie hacía esfuerzos por ayudar a la población de ambas cabeceras municipales cuya construcción urbana fue destruida en mas del 90%. Tampoco explica la enorme desorganización del COEN para enfrentar la crisis y su incapacidad operativa para ayudar a los más necesitados en todo el país. Es elocuente el hecho que de los primeros afectados del terremoto haya sido el local que utilizaría el COEN para las emergencias, lo que obligó a su traslado obligado y no planificado a los predios de la Feria Internacional.
3. La deforestación y la política de urbanización gubernamental que defiende los intereses de las empresas constructoras ha sido el factor fundamental para convertir el fenómeno natural en una tragedia de enormes proporciones. El GOES se ha empecinado en lanzar una campaña de propaganda buscando convencer a la población de la tesis que los terremotos son fenómenos fortuitos de la naturaleza y que nada se puede hacer para predecirlos ni evitar sus efectos. Más aún, niegan enfáticamente que el alud en la Cordillera del Bálsamo que sepultó más de 286 casas en la colonia Las Colinas en Santa Tecla se haya debido a la voracidad de los intereses privados.
4. El GOES a toda costa busca acallar las crecientes y enardecidas críticas de la población impidiendo el normal flujo de las comunicaciones, negándose a brindar información veraz y confiable que ayude a los pobladores a enfrentar la tragedia. Es mas, el encargado del comité gubernamental de emergencia (COEN) fue duramente criticado en su primera comparecencia ante el Congreso. Los diputados le reclamaron su pobre y ambiguo informe, su falta de seriedad para mencionar las cifras y sobre todo la absoluta irresponsabilidad con la que se está manejando la emergencia, sobre todo en municipios alejados y que han quedado totalmente aislados.
5. No obstante que la tragedia afecta directamente a más de medio centenar de municipios, el GOES ha establecido reiteradamente que el mecanismo oficial para canalizar la ayuda, enfrentar la emergencia y dirigir los trabajos de rescate excluye a los gobiernos locales y municipalidades, centralizando la actividad en funcionarios del gobierno y de la empresa privada que obviamente desconocen las necesidades locales y las repercusiones específicas del terremoto en las comunidades afectadas.
6. La población afectada y la sociedad civil empieza a dar muestras de una actuación enérgica contra la política gubernamental. Líderes ecologistas acusaron enfáticamente al Gobierno de ser el principal causante de la enorme catástrofe ocasionada por el terremoto y se aprestan a interponer una demanda judicial que busque indemnizar a las victimas y resarcir materialmente sus pérdidas.
El gobierno se ha mostrado totalmente incapaz de canalizar adecuadamente la ayuda a nuestro pueblo.
Ha excluido a las alcaldías, a las iglesias, las organizaciones no gubernamentales y los organismos de justicia.
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Absoluta Carencia de Planes de emergencia de parte del GOES
El SALVADOR
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